Cuando se producen averías en instalaciones eléctricas saltan todas las alarmas y es cuando realmente nos damos cuenta de la importancia de llevar a cabo un mantenimiento predictivo de calidad.
Hoy día, una de las principales herramientas que existen para la prevención de averías en instalaciones eléctricas son las cámaras termográficas. La termografía es una técnica que se encarga de medir temperaturas exactas a distancia y sin necesidad de que haya un contacto físico con el objeto a estudiar.
Apostar por la termografía es equivalente a reducir incidencias, ya que te ayuda a saber qué componentes están cercanos a estropearse, así como a establecer el momento óptimo para adoptar medidas correctivas.
Prevención de averías en instalaciones eléctricas, una gran ventaja de la termografía
Las cámaras termográficas aportan una serie de beneficios a tener en cuenta:
– Prevención de averías. La termografía transforma una imagen infrarroja en otra radiométrica que facilita la lectura de valores de temperatura. De esta manera, favorece la detección de recalentamientos del sistema o de piezas en mal estado, entre otros factores.
– Reducción del consumo energético. El análisis térmico facilita la detección de puntos calientes donde el sistema no está funcionando de manera eficiente. Una rápida actuación en este sentido favorece la reducción de gastos gracias a que nos da la posibilidad de actuar previamente.
– Se acortan tiempos. El tiempo que se destina al análisis o a la búsqueda del origen de una avería es mucho más rápido y eficaz gracias a las cámaras termográficas.
– Se alarga la vida útil de las instalaciones. Al tener un mayor control de en qué estado se encuentra el sistema favorecemos el correcto funcionamiento de todos los elementos.
Si deseas más información sobre esta técnica o con lo que has leído te basta para saber que es lo que necesitas, no dudes en contactar con Villa Flores Martín. Podemos ayudarte en con tus averías en instalaciones eléctricas.
Fuente: Ainia
Imagen: De Máquinas y Herramientas